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Estas terapias ya se encuentran en el cuadro básico de las instituciones de salud pública del país, con lo cual se brinda una mejor atención a pacientes con artritis reumatoide, espondilitis anquilosante y artritis psoriásica
Las terapias biológicas se han convertido en
una herramienta fundamental en el tratamiento de enfermedades
autoinmunes como la artritis reumatoide, espondilitis anquilosante y
artritis psoriásica, padecimientos que afectan las articulaciones, así
como las enfermedades de Crohn y Cuci que deterioran el tracto
intestinal.
Los también llamados biológicos han dado buenos resultados en pacientes
que tienen dificultad de respuesta ante los tratamientos tradicionales,
señalaron expertos durante el Encuentro Multidisciplinario sobre
Terapias Biológicas realizado en Cancún.
Uno de ellos es infliximab, fármaco innovador que actúa contra el
factor de necrosis tumoral (sustancia liberada por el sistema
inmunológico que interviene en el proceso inflamatorio), causante de la
progresión de éstos padecimientos, cuyos buenos resultados se han
comprobado con innumerables estudios.
Estas terapias ya se encuentran en el cuadro básico de las
instituciones de salud pública del país, con lo cual se brinda una
mejor atención a los pacientes.
En el caso de la artritis reumatoide (AR), la doctora Fedra Irazoque,
jefe del Servicio de Reumatología del Centro Médico Nacional 20 de
Noviembre del ISSSTE, apunta que con el diagnóstico temprano y con el
empleo de estas sustancias es posible frenar el proceso inflamatorio si
se inicia en los dos primeros años de evolución de la enfermedad.
Indicó que después de un año de tratamiento se puede observar que el
deterioro articular se ha detenido. Indicó que en la Ciudad de México
existen clínicas de detección temprana de AR como en el Hospital
General, el Centro Médico Siglo XXI, el Instituto Nacional de Ciencias
Médicas y Nutrición Salvador Zubirán.
Por su parte, el doctor Peter Taylor, miembro del Colegio Real de
Médicos Especialistas en Artritis Reumatoide e Inflamatoria, comentó
que de acuerdo con un estudio holandés, si la AR se detecta en etapas
tempranas y se trata con infliximab y metotexatro, se puede retirar la
terapia biológica cuatro años después de haber iniciado el tratamiento.
Asimismo se observó que 25% de los pacientes tratados ya no iban a
requerir tratamiento medicamentoso, lo cual es un hallazgo importante,
pero ello sólo se puede lograr en una minoría, la mayoría sí necesitará
la atención continua, subrayó.
También dijo que los fármacos biológicos son elaborados a base de
proteínas que están diseñadas para interferir en un aspecto específico
de del proceso inflamatorio.
Sin embargo, las ventajas con los biológico no solamente se centran en
la atención de la artritis reumatoide, en el caso de la enfermedad de
Crohn, que es un desorden del tracto digestivo que se caracteriza por
inflamación y presencia de úlceras profundas, se puede lograr una mejor
cicatrización y la reducción de las hospitalizaciones, comentó el
gastroenterólogo brasileño, Flavio Steinwurz.
Al respectó el también gastroenterólogo mexicano René Malé dijo que con
esta terapia se disminuye el uso de esteroides y en el caso de los
niños, se mejora su nutrición.
Si se habla de psoriasis, el tratamiento con inmuno-supresores alteran
los glóbulos blancos, producen anemia , problemas hepáticos, renales y
elevan las grasas en la sangre, con los biológicos esta situación se
elimina, concluyeron.
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