Una conferencia internacional en Ciudad de México trata unir fuerzas
mientras contra el SIDA mientras en Europa la enfermedad parece haber
caído en olvido.
Muchos en Alemania recuerdan aún las campañas informativas contra el SIDA que
inundaban los medios de comunicación a principios de los años noventa. Las primeras
imágenes de enfermos terminales causaban espanto. En las escuelas se probagaba el
uso del condón. El tema estaba presente, y la gente parecía estar informada.
¿Y hoy? El miedo parece haber desaparecido. Muchos tienden al descuidado, dejan de
usar condones y piensan que ya se encontró hace tiempo una cura contra esa terrible
enfermedad. Pero contra el SIDA aún no hay una cura. Cierto es que existen
combinaciones de medicamentos que alargan notablemente la vida de los afectados.
En los años 80 los infectados que tenían apenas 20 años llegaban cuando mucho a los
32. Hoy en día una persona que se contagia de SIDA en su juventud puede morir
felizmente con 80 años de una pulmonía.
La lucha se ha politizado
El SIDA, esa enfermedad invencible de los 80, parece haber perdido su terror.
¿Habremos ganado ya la batalla? No. Evidentemente nos encontramos en una fase
muy peligrosa de la lucha global contra este mal. La situación en los países
industrializados es difícilmente comparable con la tragedia que se vive en otras zonas
del planeta. Mientras que en los países industrializados mejora cada vez más el
tratameinto del SIDA, muchos países en desarollo siguen enfrentando una gran
escasez de medicamentos y médicos calificados.
Existe una estrecha correlación entre SIDA y desigualdad. Las desigualdades
económicas, de género, sociales y sanitarias son un agravante de esta enfermedad
que sigue amenazado el mundo entero. Este tema es uno de los cruciales en la XVII
Conferencia Internacional sobre SIDA, la cual se celebra del 3 al 8 de agosto en la
capital mexicana.
América Latina es por primera vez sede del mayor encuentro bianual de expertos en la
enfermedad. 22.000 expertos se dan cita en Ciudad de México para debatir los modos
de detener la enfermedad. Según cifras de ONUSIDA, 33 millones de personas están
infectadas con el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) en todo el mundo y 2
millones mueren cada año como consecuencia de la enfermedad.
Unir fuerzas
En América Latina, en el año 2007 se infectaron 140.000 personas con el virus del
SIDA, elevando a 1,7 millones la cifra de habitantes de la región que viven con VIH
(en Alemania son unos 59.000). La situación en América Latina se mantiene
relativamente estable en comparación con la década pasada.
Por algo todos los dirigentes que participaron en la ceremonia inaugural coincidieron en
que, para derrotar la enfermedad, hace falta una lucha absolutamente de todos, en
todos los frentes, con todos los recursos disponibles y con los que vendrán. En Ciudad
de México se escucha un llamado universal a cerrar las filas para entrar en combate
"ya", sin más demoras.
Cuanto más cerca nos encontremos de descubrir una cura para el SIDA, más urge
mejorar la situación en los países en desarollo, en los que ningún infectado tiene el
lujo de poder morir con 80 años de una pulmonía.
Comentarios reservados a usuarios registrados. Por favor ingrese al sistema o regístrese. Powered by AkoComment! |