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La asamblea de funcionarios del Casmu terminó con una protesta frente a
la sede del Sindicato Médico del Uruguay. Los trabajadores rechazan la
rebaja salarial y responsabilizan al empresariado médico de la
situación de crisis institucional.
"¡Aquí están, estos son, los que funden la salud!", fue el grito que se
escuchó con fuerza en bulevar Artigas, frente a la puerta del gremio
médico.
Los funcionarios del Casmu coparon casi una cuadra entera de la
calle para protestar por la reducción salarial que anunció la Junta
Directiva de la institución como forma de paliar la crisis estructural
de una empresa de salud que tiene un pasivo de más de US$ 90 millones.
La marcha hacia el Sindicato Médico fue la primera resolución que
adoptó ayer la asamblea de la Asociación de Funcionarios del Casmu
(Afcasmu) que se realizó en el Platense Patín Club y a la que
asistieron arriba de 500 personas.
Mientras los funcionarios gritaban consignas, el presidente de
Afcasmu, Luis Laxalt, ingresó al Sindicato Médico para entregar una
carta a su presidente, Alfredo Toledo, en donde se expresa la
responsabilidad que tiene el gremio "en la mala gestión que han llevado
todos estos años al frente de la empresa".
La asamblea decidió mantener y profundizar el conflicto en todos sus
términos, pero descartó en lo inmediato un paro general de actividades.
Sí se plegará al paro parcial del Pit-Cnt de mañana jueves y realizará
reuniones informativas en todos los locales del Casmu.
Los funcionarios también anunciaron que evaluarán la marcha del
conflicto y si no hay avances prometen un paro general a realizarse no
más allá del 12 de noviembre.
Además se convocó la conformación de una comisión para elaborar una
propuesta sindical de salida a la actual crisis institucional.
Recortes. Los funcionarios se quejaron el lunes que en la reunión
tripartita en el Ministerio de Trabajo, las autoridades del Casmu no
presentaron ninguna propuesta de rebaja salarial por escrito.
Ayer, antes de la asamblea, la gerente general de la mutualista,
Beatriz Silva, envió un fax a la sede de Afcasmu con el paquete de
medidas propuestas. Para los trabajadores las cosas siguen sin estar
del todo claras, y lejos de ser de recibo.
Según las cifras que se manejaron en la asamblea -contenidas en el
documento enviado por Silva- lo que el Casmu propone es un ahorro
mensual de $ 33 millones, de los cuales se sabe en concreto que $ 15
millones afectarían la masa salarial de los funcionarios no médicos y $
6,5 millones en medidas de gestión que afectarían los sueldos
gerenciales.
De todas formas, la secretaria general de Afcasmu, Cecilia Miller,
dijo a El País que la dirección del Casmu no ha sido clara en explicar
el alcance de la reducción salarial.
"Manejan conceptos generales de mejoras de gestión, de afectación de
la masa salarial, de que hay disposición al diálogo, pero no expresan
las medidas concretas".
Fuentes del Casmu confirmaron a El País que el recorte de gastos
implica un ahorro de $ 33 millones por mes y que esto implica también
una rebaja salarial a médicos y la supresión y readecuación de algunos
cargos, algo que todavía no está definido en su totalidad.
Los trabajadores protestan porque en situación de crisis siempre son
ellos los primeros afectados. Para Miller, los sueldos de la Junta
Directiva del Casmu (compuesta por ocho miembros) en la actual
situación "son insostenibles". Denunció que los salarios a nivel
gerencial "crecieron en más de $ 1 millón en los últimos años".
"Si estamos en crisis, los primeros que tienen que dar una señal de
ajuste, porque la institución no soporta ese tipo de sueldos, son los
que tienen la responsabilidad de conducir la empresa. La Junta
Directiva cobra por sentarse en las sesiones", afirmó Miller y sostuvo
que algunos de los gerentes "superan largamente los $ 100.000 de
sueldo".
gestión. El presidente de Afcasmu dijo que el sindicato ya ha
planteado que la institución "necesita recorrer el cambio en su gestión
y que debía ser reestructurada totalmente para cambiar".
Según la secretaria general del gremio "hubo por acción u omisión
una pésima política comercial que hizo que la apertura a mayores
afiliados (producto de la reforma sanitaria) al sistema mutual no
tuviera un correlato en las finanzas del Casmu".
Por su parte, el secretario general de la Federación de Salud del
Uruguay (FUS), Jorge Bermúdez, acusó a las autoridades del Casmu de
presionar al gobierno para recurrir a un salvataje económico a un año
de las elecciones nacionales.
Las cifras
90 Son los millones de dólares que el Casmu tiene como pasivo y que genera la crisis institucional que se intenta sanear.
15 Son los millones de pesos que afectarían en la masa salarial mensual de los funcionarios no médicos del Casmu.
33 Son los millones de pesos que el Casmu pretende ahorrar por mes con la reducción salarial propuesta a los funcionarios.
Cruce entre Muñoz y el SMU por responsabilidad de crisis
El presidente del Sindicato Médico del Uruguay (SMU), Alfredo
Toledo, dijo en una entrevista publicada por El País el lunes, que la
reforma del sistema de salud tuvo un fuerte impacto en la economía del
Casmu y contribuyó en su desequilibrio financiero.
La ministra de Salud Pública, María Julia Muñoz, salió ayer al cruce
de esas declaraciones y descartó cualquier vinculación entre la crisis
de la mutualista y la entrada en vigencia del Sistema Nacional
Integrado de Salud (SNIS).
"El nuevo sistema de salud no perjudica a la institución porque la
gente ha optado por los lugares donde quiere atenderse", manifestó a
radio Carve.
Muñoz recordó que la institución tiene desde hace muchos años
"déficit económicos y financieros" y subrayó que estos deben "atenderse
y corregirse para que el Casmu sea una institución a la altura de los
servicios que la población requiere".
Además, la ministra opinó que tras las declaraciones de Toledo "hay intencionalidad político partidaria".
Toledo dijo que ese tipo de observaciones son "injustas". "En primer
lugar, porque cuando estoy en la conducción de un gremio pierdo la
identidad. Y en segundo, porque las críticas que hace el sindicato no
son destructivas, sino constructivas. Atrás de la observación del
gremio siempre vino una propuesta o una solución. No es la negativa por
la negativa", afirmó y agregó que el SMU "nunca fue de obstaculizar por
cuestiones políticas".
El presidente del SMU insistió en que las medidas que se han ido
tomando desde septiembre de 2007 hasta la actualidad han impactado
fuertemente en el Casmu significando una millonaria pérdida mensual
para la institución. Por su parte, el presidente de la Asociación de
Funcionarios del Casmu (Afcasmu), Luis Laxalt, negó que la reforma sea
la causante de la crisis. "Son de décadas de mala administración y
están acumuladas hoy en la deuda que se tiene", afirmó.
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