Descubren el mecanismo por el cual el gluten llega a las capas profundas del intestino donde se desencadena la respuesta inmunológica.
La enfermedad celíaca (EC) está causada por una reacción de
hipersensibilidad o alergia a un componente del gluten conocido como
glicina. En personas genéticamente predispuestas, cuando el gluten de
la dieta llega al intestino delgado atraviesa la barrera epitelial y
reacciona con las células de la zona desencadenando una inflamación en
la mucosa. Ésta es la responsable de la diarrea y la pérdida de peso,
síntomas característicos de la enfermedad aunque no los únicos. Ahora,
las últimas investigaciones, además de desvelar por qué el gluten llega
a las capas profundas del intestino, han permitido desarrollar unas
tiras analíticas que identifican la presencia de gluten y dictaminan si
un alimento es apto o no para celíacos.
Para que se produzca una reacción de hipersensibilidad es preciso que el gluten penetre en profundidad, hasta llegar a las células submucosas del
intestino delgado, que es el lugar en donde se desencadena la respuesta
inmunológica. A pesar de que el mecanismo que llega a producir la enfermedad es bien conocido, lo cierto es que había algunas lagunas que todavía no
tenían respuesta. En un estudio publicado recientemente en la revista
"Gastroenterology", un grupo de investigadores de la Universidad de
Maryland (EE.UU.) ha identificando el mecanismo por el cual el gluten
puede llegar hasta las capas profundas del intestino.
Mecanismo culpable
Los investigadores hallaron que la gliadina, la fracción del gluten
que causa los mayores problemas, se adhiere a un receptor conocido como
CXCR3 liberando una proteína (zonulina) que provoca que la barrera
intestinal sea más permeable, permitiendo así al gluten alcanzar las
células submucosas. En los niños pequeños la enfermedad suele manifestarse con diarreas y pérdida de peso
mientras que en los niños mayores y en los adultos puede haber otros
síntomas.
Cuando la enfermedad aparece de forma tardía, la diarrea también lo
hace, aunque en menos del 50% de los afectados. Sin embargo, son
síntomas frecuentes la anemia, la osteoporosis, el estreñimiento y el
cansancio crónico. También puede aparecer irritabilidad, insomnio y
síntomas depresivos. Muchos pacientes tienen lesiones cutáneas muy
características, en forma de vesículas y costras pruriginosas, en las
extremidades y en las palmas y plantas de los pies. También pueden
producirse alteraciones menstruales, menopausia precoz, abortos
espontáneos, infertilidad e impotencia. Los dolores musculares
generalizados pueden ser otra de las manifestaciones.
La EC tardía puede dar síntomas como menopausia precoz, abortos espontáneos, infertilidad e impotencia
Hasta hace unos años, la enfermedad celíaca se consideraba una
enfermedad rara pero hoy es conocido que la padece aproximadamente el
1% de la población, aunque se sospecha que la cifra podría ser mucho
mayor dados los casos en que se presenta de forma poco clara. El
diagnóstico de la enfermedad se basa en la combinación de datos
clínicos, resultados analíticos y hallazgos característicos en la
biopsia del intestino delgado. La respuesta a la dieta sin gluten
también es otro punto que corrobora el diagnóstico. Además, en este
momento, el único tratamiento es la dieta sin gluten. Delatar el gluten
No obstante, pocos fabricantes especifican la presencia o ausencia
de gluten en sus productos, de modo que muchos celíacos prefieren no
consumirlos por miedo y eso les lleva a seguir una dieta pobre y poco
variada. Recientemente, investigadores andaluces han desarrollado unas
tiras analíticas capaces de identificar si un alimento es apto o no para celiacos, gracias a que detectan de forma rápida y
fiable la presencia de gluten. El gluten es una proteína que se
encuentra en los cereales de secano (avena, trigo, cebada y centeno) y que, junto a la predisposición genética, es la responsable de la EC.
El objetivo final de las tiras analíticas es mejorar la vida de los
afectados, facilitándoles la información para permitirles una dieta más
rica y variada. Dado que el gluten se halla principalmente en cereales
las posibilidades de intolerancia son elevadas, ya que estos se suelen
encontrar en numerosos productos. Carolina Sousa, una de las
responsables de la investigación, destaca que "existen otros productos
analíticos que no son tan específicos como estas tiras y dan una
reacción cruzada con algunos alimentos, como el chocolate o las harinas
de algunas legumbres".
Además, nos recuerda que "sólo el 10% del gluten es tóxico para los
enfermos celiacos, por lo que los métodos de análisis deben ir
dirigidos a la detección de dicha fracción en los alimentos". El
producto es el resultado de la colaboración entre investigadores del
Departamento de Microbiología y Parasitología de la Universidad de
Sevilla, la empresa biotecnológica Biomedal y el Instituto López Neyra
del CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Científicas) y, de
momento, está destinado a los laboratorios de las industrias
agroalimentarias para facilitar el análisis de los alimentos. Objetivo: la detección precoz
El Ministerio de Sanidad y Consumo (MSC) ha iniciado el reparto de
un protocolo para el diagnóstico precoz de la EC entre las comunidades
autónomas. El documento, conocido como "Protocolo de Detección Precoz de la Celiaquía", pretende
facilitar información y recursos al personal sanitario para que se
conozcan mejor los diferentes síntomas y patrones de aparición de la
patología. Con esta medida se acortará el tiempo de diagnóstico, además
de realizar un control epidemiológico de la enfermedad.
Esto supondrá una ventaja sanitaria, social y económica tanto para
el paciente como para el médico. Otro objetivo es la implantación de
una norma que limite la cantidad de gluten hasta 20 partes por millón
en los alimentos vendidos como "libres de gluten". El protocolo consta
de dos partes. En el primer apartado se describe la patología y las formas de aparición más frecuentes en función de la edad, ya que
las manifestaciones son diferentes en la infancia, adolescencia y
madurez.
En el segundo apartado se describe la guía de diagnóstico y tratamiento. Por último, el documento incluye en el anexo un decálogo de consejos
para la realización de un diagnostico precoz. Para su elaboración, el
MSC ha contado con la colaboración de profesionales sanitarios a través
de las sociedades científicas y de pacientes, representadas por la
Federación de Asociaciones de Celíacos de España (FACE).
DECÁLOGO PARA LA DETECCIÓN PRECOZ
- En el niño pequeño, los síntomas intestinales y el retraso de crecimiento, sobre todo si se
acompañan de irritabilidad y anorexia, constituyen un cuadro clínico
sugestivo de EC.
- En el niño mayor y en el adolescente, el hallazgo de
un retraso de talla o de la pubertad, así como una anemia ferropénica o
un incremento en los marcadores de función hepática (transaminasas) sin
otra justificación, obliga a descartar la existencia de enfermedad
celíaca.
- En adultos, la presentación típica de diarrea crónica
con clínica de mala absorción es inusual. Es más frecuente en la
actualidad la presencia de síntomas poco específicos.
- La probabilidad de padecer una EC aumenta en
determinados grupos de riesgo, primordialmente, los familiares de
primer grado, determinadas enfermedades autoinmunes (diabetes tipo I e
hipotiroidismo) y algunas cromosomopatías, como el síndrome de Down.
- El enfermo visitado por numerosos especialistas y
sometido a diversas exploraciones, diagnosticado "sólo" de un trastorno
funcional, merece una especial atención, en particular, si además
refiere una historia de aftas bucales, astenia, irritabilidad o
depresión.
- La EC debe incluirse en el diagnóstico diferencial de
los pacientes con dispepsia acompañada de saciedad precoz y plenitud
posprandial, especialmente si asocian flatulencia, hinchazón y
meteorismo. La sospecha debe ser firmemente considerada cuando los
síntomas son crónicos y recurrentes y no han respondido adecuadamente a
ningún tratamiento empírico.
- Los pacientes con diarrea acuosa crónica e
intermitente y que han sido catalogados de síndrome de intestino
irritable deben ser revisados de forma minuciosa. La coexistencia de
flatulencia o distensión abdominal y deposiciones mezcladas con
abundante gas (explosivas) obliga a considerar la posibilidad de una
EC. El estreñimiento crónico no es un síntoma excluyente de padecer la
EC.
- Las situaciones siguientes, sin explicación
demostrable, obligan a valorar el diagnóstico de EC: mujeres en edad
fértil con anemia ferropénica, infertilidad y abortos recurrentes;
elevación de transaminasas; y los que refieren una historia de
fracturas ante traumatismos mínimos o una osteoporosis detectada antes
de la menopausia o en un varón adulto joven.
- Los marcadores serológicos (AAtTG) negativos no
permiten excluir el diagnóstico de EC. De hecho, una proporción de
pacientes con enfermedad celíaca, que presentan formas histológicas
leves e incluso con atrofia de vellosidades, no expresan anticuerpos
antitransglutaminasa en el suero.
- El estudio genético es útil en el manejo de la
enfermedad celíaca, dado que casi la totalidad de los pacientes
celíacos son HLA-DQ2 o DQ8 positivos. Su determinación tiene utilidad
clínica en casos de pacientes con sospecha clínica bien fundada y
estudio serológico negativo. Un estudio genético negativo excluye casi
totalmente la enfermedad celíaca, evitando con ello pruebas invasivas,
incómodas y de mayor coste.
Comentarios reservados a usuarios registrados. Por favor ingrese al sistema o regístrese. Powered by AkoComment! |