«Se actuó como se tenía que actuar». «Sería una irresponsabilidad poner
en cuestión el trabajo de la Organización Mundial de la Salud». «Si no
se hubieran seguido los protocolos internacionales y los informes de
los expertos, la situación habría sido diferente». Estas contundentes
afirmaciones las realizó la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, en
un encuentro que tuvo ayer con su homólogo mexicano, José Ángel
Córdova, en un acto en la Casa América de Madrid.
Los máximos responsable de Sanidad de ambos países coincidieron en
afirmar que la OMS actuó «correctamente» desde el inicio de la pandemia
en la primavera del año pasado, e insistieron en que gracias a la
alerta y las medidas de prevención impulsadas por esta organización
internacional el mundo ha tenido capacidad para evitar que la
enfermedad se propagara con «mayor agresividad».
Tanto Jiménez como Córdova negaron que la OMS haya actuado influenciada
por los intereses de las empresas farmacéuticas. Es más, señalaron que
las críticas recibidas por esta institución a este respecto solo se
están planteando en Europa. La ministra española aclaró que, a pesar de
todo, la OMS está llevando a cabo auditorías internas y evaluaciones
para demostrar que se actuó bajo evidencias científicas y no
comerciales. «Fue una actuación muy coordinada, en la que
prácticamente hablábamos todos los días. Todas las decisiones se han
tomado de forma conjunta entre los distintos Gobiernos, las
organizaciones internacionales y los grupos de expertos, y no de forma
unilateral desde la OMS», afirmó Trinidad Jiménez. Esta postura fue
compartida al cien por cien por el titular de Sanidad mexicano, quien
añadió: «Es inverosímil pensar que las decisiones se toman por los
criterios individuales de alguien».
Ambos
mandatarios reconocieron que las poblaciones de sus países son reacias
a vacunarse contra la gripe A. De hecho, la ministra española explicó
que de los diez millones de personas que forman los grupos de riesgo
que debían haberse inmunizado en este país, solo lo han realizado tres
millones, a pesar de las campañas y recomendaciones hechas desde el
ministerio.
Por su parte, José Ángel Córdova
informó de que su país ha comprado 30 millones de vacunas y que desde
diciembre solo se la han puesto tres millones de ciudadanos, sobre todo
desde que se vacuna en supermercados y estaciones de metro.
El
político centroamericano reclamó una compensación económica
internacional para su país por haber cumplido con el reglamento de
informar de la existencia del nuevo germen en un plazo de 72 horas.
Esta decisión supuso una pérdida económica del 0,7% del PIB mexicano
por la bajada del turismo y del comercio. Comentarios reservados a usuarios registrados. Por favor ingrese al sistema o regístrese. Powered by AkoComment! |