Los médicos en España recetan medicamentos más baratos a pacientes
activos y más caros a los pensionistas -que no pagan por sus
medicamentos-, según las conclusiones de un estudio realizado por un
grupo de investigadores en Economía de la Salud sobre datos procedentes
de ocho comunidades autónomas y de más de 1.900 observaciones
correspondientes a áreas de salud y medicamentos.
El análisis, presentado en las XXX jornadas de Economía de la Salud
que se celebran en Valencia, se centró en el análisis de 17 tipos de
fármacos correspondientes a dos grandes familias: cardiovasculares (para
controlar la tensión arterial y el colesterol, por ejemplo), y
psicofármacos (antidepresivos, hipnóticos, etc.).
Al respecto, la catedrática de Economía Aplicada en la Universidad
de Las Palmas de Gran Canaria, Beatriz González López-Varcárcel,
explicó que el médico, en su ejercicio diario, "ejerce un doble papel de
agente, por un lado, del paciente, buscando beneficiarle al máximo
posible; pero por otro, también desempeña un rol de agente del Sistema
Nacional de Salud, velando por mantener la sostenibilidad del sistema y
haciendo un uso racional de los recursos disponibles".
Así, constató, junto a otros investigadores -Julián Librero,
Salvador Peiró y Gabriel Sanfélix-, que "cuanto más caro es el
medicamento para el paciente, más se preocupa el médico de buscarle una
alternativa más barata". De este modo en el caso de los pacientes que
tienen que pagar por su medicamento, los médicos se afanan para
recetarle el menos costoso. Sin embargo, no ocurre así en el caso de los
pensionistas y en el del grupo de fármacos sin coste para la población,
en el que los galenos recetan medicamentos más caros que otros con
iguales características y menor precio.
Según esta experta, "es algo que hasta ahora no se había
investigado y que tiene una trascendencia muy importante para la toma de
decisiones en la gestión sanitaria, puesto que afecta en gran medida al
gasto en medicamentos de la Sanidad española".
Así, Beatriz González señaló dos "importantes" conclusiones que se
derivan del estudio: que el médico es más agente del paciente que del
sistema sanitario en su conjunto y que se está recetando de forma
diferente a pensionistas y pacientes activos, "tan sólo porque unos no
tienen que pagarse el fármaco y los otros sí".
Ante esto, "merece la pena que el sistema sanitario se plantee
cómo gestionar esta situación", mantuvo y en ese sentido, consideró que
"quizá unas medidas que puedan ayudar a paliar esta realidad pueda ser
la implantación de sistemas de incentivos para los prescriptores de
recetas, así como de protocolos y guías de prescripción más estrictos en
el conjunto del Sistema Nacional de Salud". Comentarios reservados a usuarios registrados. Por favor ingrese al sistema o regístrese. Powered by AkoComment! |