La Clínica Universidad de Navarra, España ha desarrollado una
nueva técnica eficaz para algunos pacientes con hiperhidrosis en manos y
pies como alternativa al tratamiento quirúrgico.
Se trata de un procedimiento indoloro, que no precisa anestesia general
ni ingreso hospitalario, y ha comenzado a aplicarse con éxito, como
alternativa a la cirugía, para resolver casos severos de sudoración
excesiva.
La llamada radiofrecuencia percutánea, es una técnica cuya utilización
en pacientes con hiperhidrosis ha sido desarrollada por un equipo de
especialistas de esta clínica española. Este procedimiento es empleado
habitualmente para tratamientos de dolor crónico neuropático, pero su
aplicación en hiperhidrosis no se había desarrollado hasta ahora.
En la actualidad, la hipersudoración constituye un problema médico
que afecta a cerca de un uno por ciento de la población general. La
principal función de la sudoración es la regulación de la temperatura
del organismo. Sin embargo, en ocasiones, la cantidad de sudor en
determinadas áreas anatómicas puede llegar a ser demasiado intensa y
convertirse, para las personas afectadas, en un problema de salud
importante. Es entonces cuando puede hablarse de hiperhidrosis, una
afección cuya solución médica consiste en un tratamiento personalizado
que, en muchas ocasiones, “cambia la vida a las personas que lo
padecen”, asegura el doctor Agustín España, director del Departamento de
Dermatología de la Clínica.
La hiperhidrosis es un problema médico que requiere un abordaje
multidisciplinar contrario al enfoque que se le da hoy en día, que es
enfocado sobre todo en el aspecto dermatológico.
E nuevo tratamiento es mínimamente invasivo. Este nuevo método abre
una ventana de esperanza en los pacientes que los tratamientos
dermatológicos se muestran ineficaces, y como opción al quirúrgico.
Se trata de aplicar radiofrecuencia percutánea, con control radiológico,
en la cadena simpático-torácica, encargada de transmitir los impulsos
nerviosos desencadenantes del sudor, así como del rubor facial.
Interrumpir la cadena simpática sin operación
El nuevo procedimiento tiene como objetivo interrumpir los impulsos
nerviosos en determinados niveles de la cadena simpática, mediante la
utilización de ondas de radiofrecuencia. Se hacen punciones en
diferentes puntos de la espalda, mediante una aguja conectada a un
equipo emisor de ondas de alta frecuencia.
La temperatura elevada consigue interrumpir la conducción del impulso
nervioso generador del exceso de sudor, lo que contribuye a aliviar la
sintomatología del paciente”.
La radiofrecuencia percutánea se realiza mediante control radiológico,
bien en quirófano ambulatorio o bien guiado por TAC. Primero se ubica la
zona ubicada entre las vértebras T2 y T4 para el sudor en manos, y
entre la L1 y la L5 para el de los pies. De esta forma la administración
local de temperatura elevada durante un corto periodo de tiempo
consigue la destrucción del tejido nervioso, y por tanto, suprime la
transmisión del impulso. El tratamiento tiene una duración aproximada de
una hora, es ambulatorio y sólo requiere leve sedación y anestesia
local.
Eficacia del tratamiento
Hasta la fecha, la eficacia obtenida con la radiofrecuencia percutánea
en el tratamiento de la hiperhidrosis de manos y pies se sitúa en torno
al 50-60%, según la Clínica Universidad de Navarra. No obstante, el
procedimiento estrella para los casos más severos sigue siendo el
quirúrgico que ofrece un nivel de satisfacción elevado en más del 80% de
los pacientes operados.
La cirugía para tratar la hiperhidrosis consiste en efectuar dos
incisiones en cada lado del tórax, de 1,5 ó 2 cm, por donde se introduce
una óptica que permite localizar la cadena simpática. Una vez
localizada, el cirujano debe seccionarla a la altura del segundo y/o del
tercer ganglio simpático. La intervención se practica en los dos lados
del tórax y, en conjunto, suele prolongarse por espacio de una hora. El
procedimiento quirúrgico se realiza con anestesia general y requiere un
ingreso hospitalario de 24 horas. El paciente puede incorporarse a su
vida normal, aproximadamente, una semana después de la intervención. En
ciertos casos pueden manifestarse determinados efectos secundarios tras
la operación, como dolor postquirúrgico en la zona intervenida y, en
algunas ocasiones, un fenómeno de sudoración compensatoria por el que la
hipersudoración se traslada a otras áreas del cuerpo en las que,
normalmente, el trastorno resulta menos limitante.
Además del elevado nivel de satisfacción expresado por más de un 80% de
los pacientes intervenidos mediante cirugía, en el caso de la
hiperhidrosis en las manos la eficacia es prácticamente del cien por
cien de las personas operadas. Comentarios reservados a usuarios registrados. Por favor ingrese al sistema o regístrese. Powered by AkoComment! |