A partir del accidente de la calle Juncal, el Ministerio de Trabajo
reconoció que en más del 60% de las inspecciones realizadas en obras de
construcción se detectan fallas relacionadas con la seguridad. Desde
noviembre de 1993 hasta hoy se han registrado 130 accidentes fatales.
Los dos obreros que murieron sepultados bajo los escombros del edificio
derrumbado en la Ciudad Vieja y otro trabajador fallecido el sábado en una
obra que se realizaba en Santa Clara del Olimar, vienen a engrosar el
número de trabajadores de la construcción fallecidos en el medio de sus
labores. El Sindicato Único Nacional de Construcción y Anexos (Sunca)
denuncia
que no se respetan las normas elementales de seguridad y es terminante:
exigen mayor contralor, prevención y penalización.
En los últimos trece años han muerto 130 obreros en todo el país y el promedio sostenido de ocho muertes anuales se disparó este año con 14 obreros fallecidos en nueve meses.
Para el dirigente del Sunca, Carlos Rossi es "una infamia y una crueldad que se sigan procesando trabajos sin las normas elementales de seguridad".
Según Rossi, las normas que regulan al sector en materia de seguridad "no se aplican" y "faltan controles efectivos en las obras". Además, criticó la poca previsión que existe al momento de expedir los permisos obligatorios para comenzar las obras.
"Cuando se libran los permisos de construcción se deberían tomar recaudos y exigirle a las empresas que las condiciones técnicas de seguridad sean las necesarias para no correr riesgos", señaló.
La inspectora general de Trabajo, Mariana Narducci, dijo a Ultimas Noticias que "en más del 60 % de las inspecciones realizadas en obras de construcción se efectúan observaciones de algún tipo, en mayor o menor medida".
Narducci explicó que las fiscalizaciones se hacen de acuerdo a la norma que regula las condiciones de seguridad e higiene en la construcción (Decreto 89/995), en las que no cabe lo relacionado con la parte estructural y de cimentación del edificio. "Eso no nos compete", dijo.
"Las observaciones consisten en intimaciones en las que se establecen plazos para la corrección de lo que está apartado de la norma y en algunos casos se llega a la clausura preventiva", explicó la inspectora.
Por el lado de la gremial de la construcción se asegura que la normativa que refiere a las normas de seguridad e higiene son buenas y completas. El problema es que no se cumplen.
Julio Rodas, del Sunca, señaló a este matutino que "para tener una buena seguridad en una obra hay que invertir. Los servicios tienen un costo. Los equipos, los andamios, vallas, redes, apuntalamiento, todo tiene un costo."
El problema surge cuando para abaratar costos, los empresarios no invierten en estos temas. Rodas manifestó que en las licitaciones es común que los presupuestos no incluyan elementos de seguridad para bajar los números y ganarla. Y también hay otra situación: aquellas licitaciones que sí incluyen estos elementos, pero luego de "conseguir" la obra, no los compran y "se ahorran esa plata para su bolsillo".
Otro punto a considerar acerca de la seguridad en la construcción es la presencia de un técnico prevencionista en las obras. Representantes del Sunca indican que si bien muchas empresas contratan técnicos, si éste exige mucho, los constructores suelen despedirlos.
Para la gremial, también es fundamental la presencia de delegados en las obras, aunque señalaron que muchas veces están expuestos a presiones.
La vida no vale nada
Por otra parte, el Sunca sostiene que cuando no hay delegados no técnicos, es el capataz quien debe ser el encargado de la seguridad en las obras. "Pero es el mismo capataz que manda a trabajar a un obrero a diez pisos de altura sin conocer si el obrero sufre de hipertensión o tiene miedo a las alturas. Lo mismo para abajo. Lo mandan meterse en un pozo, desconociendo si es claustrofóbico o tiene problemas respiratorios".
El gremio de la construcción exige como norma en el sector, algo que muy pocas empresas hacen: un control médico antes de ingresar a la obra.
Rodas, informó que muertes como la ocurrida en el derrumbe de Ciudad Vieja cuestan trece mil pesos. "Entonces, pago la multa y no invierto en seguridad. Y no puede ser.
No hay penalizaciones fuertes, no hay clausura por tiempo indeterminado". El integrante de la gremial de trabajadores, señaló que la realidad es clara: "la gente cuida más el trabajo que su propia vida".
Informalidad
Uno de los mayores problema que enfrenta el Sunca es la informalidad que reina en el gremio. Cifras que poseen los sindicalistas, señalan que en la industria de la construcción hay alrededor de 80 mil trabajadores mientras que los últimos registros en el Banco de Previsión Social hay registrados 35.000.
Esto arroja que un 60% de los trabajadores son informales. Para la gremial, esta es una cifra histórica.
Seguridad por decreto
La reglamentación vigente que regula las condiciones de seguridad e higiene en la construcción están incluidas en el decreto 89/995 con fecha del 21 de febrero de 1995.
La normativa se aplica a todas las actividades realizadas por contratistas, subcontratistas, propietarios que realicen obras por administración directa, con o sin la intervención de contratistas y/o subcontratistas, trabajadores por cuenta propia y trabajadores subordinados de la industria de la Construcción
En el decreto se detalla con precisión cada una de las áreas en las que los responsables de la obra de construcción y los propios obreros deben tomar recaudos.
Es así que hay apartados donde se precisan con meticulosidad todos los elementos que componen las tareas y cuidados referentes a las instalaciones eléctricas, las maquinarias y herramientas, los andamios, equipos de elevación y transporte, guinches, torres grúas, cuerdas, poleas, carretillas, etc.
La seguridad personal de los trabajadores de la obra en construcción se detalla de acuerdo a la tarea específica a la que está asignado el obrero.
Los medios de protección para defender la salud y seguridad del trabajador, serán de uso obligatorio y deberán ser provistos por le empleador, en forma gratuita, así como las instrucciones de uso y mantenimiento, debiendo proveer aquellos elementos necesarios para los mismos. El tipo de protector y los materiales que se empleen en su confección, deberán ser adecuados al uso a que se les destina cuidando que no dificulten el trabajo ni perjudiquen al operario.
Los elementos de seguridad incluyen entre otras cosas: protección de la cabeza, los ojos, los oídos y las manos.
El decimocuarto
El sábado de mañana, falleció otro obrero de la construcción. El accidente fatal ocurrió en Santa Clara de Olimar, en el departamento de Treinta y Tres. El obrero cumplía funciones en una torre a diez metros de altura, cuando se cortó una linga de la grúa, aplastando al trabajador la pluma de la misma. Julio César Ávila, casado y con dos hijos, se convirtió en el decimocuarto obrero que ha perdido la vida en lo que va de 2006. A raíz de este hecho, el Ministerio de Trabajo dispuso de oficio la clausura de todas las obras en las torres que se están construyendo en el territorio nacional.
Dantesco
El juez penal de 5° turno, Daniel Tapié, comenzará hoy los interrogatorios por el derrumbe del edificio de la Ciudad Vieja, al tiempo que ordenó la autopsia de los fallecidos y pericias forenses a los lesionados.
A partir de la hora 9, el magistrado tomó declaración a siete personas vinculadas a la obra, Dirección Nacional de Bomberos e Intendencia Municipal de Montevideo (IMM) para investigar las eventuales responsabilidades del derrumbe que le costó la vida a dos obreros de la construcción y causó lesiones en otros cuatro.
Según pudo saber Ultimas Noticias, Tapié citó a declarar al arquitecto Raúl Wilner, responsable de las obras, capataz Luis Lima Britos, ayudante soldador Martín Rodríguez Carril y técnico prevencionista Ricardo Scorza.
Asimismo, esta mañana comparecerán en el juzgado de Bartolomé Mitre los arquitectos Fermín Arribillaga, de la IMM, y José Luis Fernández, de Bomberos, así como el oficial encargado de los interrogatorios por parte de Bomberos.
El magistrado dispuso, además, que un médico del Instituto Técnico Forense examine a los lesionados y se realice la autopsia de los fallecidos.
Tapié se constituyó en la tarde del sábado en el lugar del derrumbe, donde dialogó informalmente con el intendente municipal de Montevideo, Ricardo Ehrlich, y autoridades de la comuna y Bomberos.
En la oportunidad, el juez dejó la investigación en manos de Bomberos, a cuyas autoridades requirió la confección de un informe completo sobre las actuaciones desarrolladas en el lugar.
Integrantes de Bomberos ya tomaron declaración al arquitecto Wilner, técnicos de la obra y obreros, de todo lo cual se dio cuenta a Tapié.
El magistrado, junto al representante del Ministerio Público y Fiscal, procurarán determinar a través de la investigación si caben responsabilidades de índole penal a alguno de los involucrados en la obra.
Con permiso
Por otra parte, el Servicio de Contralor de Edificaciones de la Intendencia Municipal de Montevideo dio a conocer ayer un informe preliminar sobre el derrumbe ocurrido en Juncal 1400. Según el documento, firmado por el arquitecto Germán Prat, la obra cuenta con permiso de construcción aprobado, siendo su técnico patrocinante el arquitecto Raúl Wilner.
El texto señala que "se trata de una construcción con sistema combinado de cerramientos superiores, de techos a la porteña en pisos superiores (con escuadrías de madera) y bovedillas con viguetas de hierro en entrepisos inferiores que descargan sobre muros portantes".
Añade que las construcciones "datan de 1927 en su casco original, con antecedentes de reformas de los años 1957 y primeros de la década del '60".
La información del derrumbe fue notificada a las 15.15 horas del jueves y se especifica que "en todo momento se contó con la presencia e intervención del arquitecto Raúl Wilner (técnico responsable de la obra) y la empresa Tramec que convocada por éste, conjuga esfuerzos con organismos públicos desde la hora 9".
Ayer, el intendente de Montevideo, Ricardo Ehrlich, manifestó que "es muy prematuro dar información sobre el derrumbe, hoy es momento de compartir el dolor y resolver la situación de toda esta gente, esa es nuestra mayor preocupación".
"Luego, más en frío, se analizarán las responsabilidades en lo que corresponda", agregó.
En tanto el oficial de Bomberos, Jorge Roqueta, dijo que en accidentes como éste "siempre hay responsables" pero el informe se dará a conocer en algunos días. Precisó que "se van a tomar en cuenta el debilitamiento del apuntalamiento, cálculos, cargas establecidas, retiro de muro, portantes y estructuras internas. Es un peritaje que ya comenzamos”.
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