Las madres de bebés con eccema moderado a severo tienen niveles de estrés más altos que las mamás de niños con diabetes o sordera profunda, indicaron los resultados de un nuevo estudio a pequeña escala.
El eccema es un trastorno de la piel que causa enrojecimiento, hinchazón y picazón, y que puede aparecer por alergia, sustancias irritantes o herencia genética.

Los bebés con eccema no pueden dormir bien y presentan signos de mucho estrés, lo que también afecta a los padres, informó el equipo dirigido por el profesor Andrew Kemp, del Hospital de Niños de Westmead, en Sidney, Australia.

Los investigadores evaluaron el estrés parental en 33 madres de niños de 5 años o menos con eccema moderado a severo. Los 33 niños habían tenido eccema en los últimos 2,8 años y estaban hospitalizados o recibían cuidados ambulatorios de un alergista, un inmunólogo o un dermatólogo pediátricos.

Las madres de estos niños tenían niveles de estrés tan altos como los que suelen presentar las mamás de chicos con asma o discapacidades graves que exigen alimentación por sonda.

Los investigadores destacaron también que esos niveles de estrés subían en las madres según aumentaba la severidad del eccema en sus hijos. Los resultados de la investigación fueron publicados en la revista Archives of Disease in Childhood.

El 24 por ciento de las madres de niños con eccema tenía altas calificaciones para la depresión, mientras que el 46 por ciento mostraba niveles de estrés lo suficientemente altos como para indicar la necesidad de asistencia profesional.

Casi la mitad de las madres dijo que se sentía incompetente para controlar la conducta de su hijo: para un 67 por ciento, su hijo era muy demandante, y para el 56 por ciento, el niño no podía adaptarse a los cambios físicos o sociales que provocaba su condición.

Los profesionales de la salud que cuidan a estos niños deberían conocer el efecto significativo que puede tener la condición del pequeño en los niveles de estrés maternos, que aumentarían con la ausencia de apoyo del esposo.

Se necesitan más estudios para determinar cómo minimizar mejor este estrés.