Un juez de Mar del Plata ordenó que la intervención se haga en el Hospital Gutiérrez. Sería un caso inédito en nuestro país. I.E., de 30 años, es el primer extranjero en conseguir la reasignación de identidad; sueña casarse con su pareja y adoptar varios niños. "Me tengo que operar porque no soy ni nunca me sentí hombre", dijo al diario La Nación. El perito forense José Fraraccio detalló en su informe al juez que I. E. "siente, actúa y se viste como mujer". "Es una persona de sexo femenino en un cuerpo de varón".
Un ciudadano uruguayo es el primer extranjero en lograr que la justicia argentina le habilite para una operación de cambio de sexo. I.E., de 30 años, no solo accederá a la identidad femenina, sino a todos los derechos propios de cualquier mujer: adoptar hijos, gozar licencias por maternidad, etcétera.
El juez marplatense lo autorizó esta semana a someterse a una cirugía de reasignación sexual. "Sufrí mucho en todos estos años y creo que con esta resolución me están otorgando lo que me merezco", agregó el uruguayo. La noticia que recibió con la sentencia que lleva la firma del juez Enrique Félix Arbizu, titular del Juzgado en lo Civil y Comercial Nº 11, aún no le permite borrar de su mente una historia dominada por desprecios y discriminación. I. E. asegura que nunca se identificó con sus formas masculinas y que a los 11 años comenzó a vivir acorde con su sexo psicológico. Y le costó caro: "Me sentí excluida y me vi obligada a abandonar mis estudios secundarios". El perito forense José Fraraccio detalló en su informe al juez que I. E. "siente, actúa y se viste como mujer". "Es una persona de sexo femenino en un cuerpo de varón". El uruguayo cuenta que su condición de transexual apareció como un obstáculo cada vez que quiso ser parte del mercado laboral formal. Sólo pudo conseguir algunos empleos temporales, la mayoría de ellos como doméstico en casas de familia. La decisión de I.E. de radicarse en Mar del Plata no fue casual. La tomó apenas vio que en este departamento judicial prosperaban recursos de amparo de quienes planteaban casos de reasignación sexual. Por eso se puso en contacto con el doctor César Fidalgo, del hospital Gutiérrez, de La Plata, a cargo de este tipo de cirugías, y los abogados locales Fernando López y Andrea Privitera, especialistas en este género de demandas judiciales. El fallo del juez Arbizu lo tomó con satisfacción, pero asegura que aún no lo disfruta en plenitud porque siente que todavía queda un largo camino por recorrer. "La satisfacción va a ser plena cuando todo esto termine", dice, acerca del día siguiente a la cirugía y el momento en que en su DNI pueda ver reflejada su nueva identidad. Actualmente I.E. está en pareja. "Tengo la suerte de tener un esposo que se ocupa de mí", destaca. Y confirma que, apenas concluya la operación y figure en los registros como mujer, quiere casarse y adoptar un hijo. "La capacidad de ser madre —insiste— no se da por el solo hecho de parir" (El País, martes 21 de marzo).
La justicia autorizó
La Justicia marplatense autorizó a una mujer a someterse a una operación para cambiarse de sexo. Si se concreta la intervención, sería el primer caso en nuestro país. Hasta el momento, sólo hubo casos de cambio de sexo inversos. El juez en lo correccional Juan Manuel Fernández Daguerre hizo lugar a un amparo y habilitó al hospital Gutiérrez para realizar la operación, que aún no tiene una fecha precisa. La mujer, de 50 años, será sometida a las “intervenciones quirúrgicas que resultaran necesarias” para adecuar los órganos genitales femeninos al género masculino. Asimismo, como es costumbre en estos casos, el magistrado marplatense ordenó la modificación de su nombre y tipo de sexo en el documento nacional de identidad (Clarín, lunes 20). El juez Enrique Arbizu, titular del Juzgado Civil y Comercial de Mar del Plata autorizó una operación de cambio de sexo. Esta vez será para una persona de 30 años quien le expresó a un diario capitalino su necesidad de operarse dado que "no soy ni nunca me sentí hombre". A partir de la operación, I.E., -como pidió que se lo llamara-, accederá no sólo a una identidad femenina en sus documentos, sino a todos los derechos propios de cualquier mujer: desde adoptar hijos hasta gozar de licencias por maternidad. I.E. tiene 26 años; es de nacionalidad uruguaya, y su caso sería el primero de un extranjero que logra aquí un fallo de estas características. "Sufrí mucho en todos estos años y creo que con esta resolución me están otorgando lo que me merezco", dijo. La noticia que recibió con la sentencia que lleva la firma del juez Enrique Félix Arbizu, titular del Juzgado en lo Civil y Comercial Nº 11, aún no le permite borrar de su mente una historia dominada por desprecios y discriminación. Asegura que nunca se identificó con sus formas masculinas y que a los 11 años comenzó a vivir acorde con su sexo psicológico. Y le costó caro: "Me sentí excluida y me vi obligada a abandonar mis estudios secundarios". El perito forense José Fraraccio detalló en su informe al juez que I. E. "siente, actúa y se viste como mujer; es una persona de sexo femenino en un cuerpo de varón". Por eso I.E. dice que sólo ahora está comenzando a vivir su vida. "Antes la padecí", asegura. Enumera, entonces, las dificultades para ganarse la vida a través de un trabajo digno. Cuenta que su condición de transexual apareció como un obstáculo cada vez que quiso ser parte del mercado laboral formal. Sólo pudo conseguir algunos empleos temporales, la mayoría de ellos como doméstico en casas de familia. La decisión de radicarse en Mar del Plata no fue casual. La tomó apenas vio que en este departamento judicial prosperaban recursos de amparo de quienes planteaban casos de reasignación sexual. Por eso se puso en contacto con el doctor César Fidalgo, del hospital Gutiérrez, de La Plata, a cargo de este tipo de cirugías, y los abogados locales Fernando López y Andrea Privitera, especialistas en este género de demandas judiciales. Al fallo del juez Arbizu lo tomó con satisfacción, pero asegura que aún no lo disfruta en plenitud porque siente que todavía queda un largo camino por recorrer. "La satisfacción va a ser plena cuando todo esto termine", dice, en referencia al día siguiente a la cirugía y al momento en que en su DNI pueda ver reflejada su nueva identidad. Actualmente I.E. está en pareja. "Tengo la suerte de tener un esposo que se ocupa de mí", señala. Y confirma que, apenas concluya la operación y figure en los registros como mujer, quiere casarse y adoptar un hijo. No les teme a las críticas ni mucho menos al desafío. "La capacidad de ser madre -insiste- no la da el solo hecho de parir" (La Capital de Mar del Plata, lunes 20 de marzo). Primera operación se realizó en 1998
El equipo médico que realizará la intervención quirúrgica que transformará a una mujer en hombre en el Hospital Gutiérrez de La Plata, fue el primero que realizó una operación de cambio de sexo en el país en 1998. En esa oportunidad fue operada exitosamente Juana Luffi, quien durante cincuenta años padeció una ambiguedad sexual al nacer con órganos masculinos atrofiados, los que fueron extraídos en la operación. Posteriormente, en 1991, se realizó una intervención similar en Susana Panello, una mujer de 59 años, de Mar del Plata, que consiguió la autorización judicial para adaptar sus genitales a su identidad psíquica. Panello había sido autorizada por el juez de Mar del Plata, Pedro Hoft a someterse a una operación que elimine los vestigios de genitales masculinos. La mujer nació con una atrofia genital conocida como mal de Klenifelter por la cual fue inscripta como Juan Carlos Panello y durante toda su vida sufrió el rechazo en el ámbito escolar e incluso entre su familia (Radio Mar del Plata, lunes 20 de marzo). Comentarios reservados a usuarios registrados. Por favor ingrese al sistema o regístrese. Powered by AkoComment! |