La Consejería de Sanidad comenzará el próximo lunes, día 15, la campaña
de vacunación contra la gripe, que se prolongará hasta el día 16 de
noviembre. Salud Pública ha previsto la adquisición de 119.800 dosis
(675.000 para toda la región) aunque, según la demanda y las
necesidades, podría ampliar esta cifra en un 20%.
La vacunación está dirigida fundamentalmente a los mayores de 60 años y
grupos de riesgo como adultos y menores con más de seis meses que
padezcan enfermedades crónicas, discapacitados, mujeres embarazadas a
partir del segundo trimestre de gestación y personas que residan en
instituciones cerradas como las residencias geriátricas o de
disminuidos psíquicos.
También la campaña antigripal está especialmente dirigida a
menores, de entre 6 y 18 años, que sigan tratamientos prolongados con
ácido acetil salicílico (aspirina) por la posibilidad de desarrollar un
Síndrome de Reye, una insuficiencia hepática grave.
La Junta potenciará especialmente su campaña para ampliar la
cobertura de inmunización entre la población que tiene entre 60 y 64
años debido a que este tramo de edad fue incluido por primera vez en la
campaña anterior y sólo el 41,4% se vacunó frente al 77% de entre 65 y
75 años, edad a la que tradicionalmente se ponía una dosis antigripal.
También los profesionales sanitarios y los profesores serán
objetivo principal dada su constante convivencia con grupos amplios de
personas y, en el primer caso, además de enfermos.
Bomberos y policía
El consejero de Sanidad, Francisco Javier Álvarez Guisasola,
presentó ayer la campaña junto al director de Salud Pública, Javier
Castrodeza. El máximo responsable de la Administración sanitaria
explicó que la vacuna podrá recibirse de forma gratuita en los centros
de salud, hospitales, lugares que atienden a personas que acuden a
centros públicos o privados y puntos de trabajo.
La vacunación también está recomendada a bomberos, policía o
personal de protección civil, entre otros profesionales de servicios
esenciales, para trabajadores de granjas y mataderos de aves y, este
año, la Junta hará una especial campaña entre sus empleados públicos.
La inversión inicial para la campaña antigripal y antineumocócica es de
4,6 millones de euros.
Una temporada leve
Según explica el doctor Castrodeza, «no hay razones
actualmente para prever una temporada diferente de la anterior» y, en
principio, todo apunta a una epidemia leve. La incidencia en la pasada
temporada en Castilla y León fue moderada y la tasa registrada fue de
2.200 casos por cada 100.000 habitantes, de forma similar al resto de
España y Europa. El pico epidémico se alcanzó en la quinta semana de
este año, es decir, la última de enero, y remitió hacia finales de
marzo.
La incidencia de este virus entre la población de la comunidad
suele ser menor de la del resto de España debido a que Castilla y León
disfruta de la mayor cobertura vacunal. Así, el año pasado Sanidad
vacunó a 640.000 personas en la región, de forma que se llegó al 25,5%
de la población general. No sólo tuvo una amplia cobertura en los
tramos ya citados, 41,4% entre 60 y 64 años, sólo por detrás de la
Rioja, y de los mayores de dicha edad (77%); lo que sitúa a Castilla y
León en cabeza sino que entre los mayores de 75 llegó al 82,2% de la
población.
Tasas de hasta el 20%
El consejero recordó que tanto la gripe como el neumococo,
contra el que Sanidad vacunará a la vez, se transmiten de forma directa
de persona a persona y por vía respiratoria, lo que permite su
extensión de forma epidémica, sobre todo en los meses de invierno.
La gripe es un importante problema de Salud Pública no solamente
por sus complicaciones sino por su mortalidad y, aunque tiene
tratamiento, la mejor terapia es la prevención con una dosis
antigripal. Altamente contagiosa, producida principalmente por los
virus influenza tipo A y B, puede llegar a provocar pandemias. Su
incidencia suele oscilar entre tasas del 5% al 20% de la población,
aunque puede llegar al 50% entre personas internadas como en las
residencias de ancianos.
La gripe provoca además un alto absentismo laboral, el 28% de los casos han provocado una baja laboral.
Respecto a la gripe aviar, Álvarez Guisasola destacó que, en la
actualidad, hay 328 casos en humanos de los que 200 han fallecido.
Señaló asimismo el consejero que no había ningún caso en humanos en
Europa pero que, no obstante, la alerta sanitaria sigue vigente, hay
preparadas dosis antivirales para una epidemia.
La vacuna contra la gripe común es útil también para los catarros
pero no frente a la influenza aviar que es un virus distinto. La única
ventaja es que aumenta el escudo inmunológico. En el caso de que una
persona pudiera estar en contacto con ambos virus y se contagiara de
los dos a la vez, si está vacunado contra la común evitaría una de las
dos enfermedades.
|