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Además es necesaria la realización de un chequeo médico previo que permita determinar la existencia de factores de riesgo y el grado de exigencia que el organismo puede soportar. Culminar la rutina con quince minutos de enfriamiento favorece que el organismo recupere lentamente su estado fisiológico de reposo.
El calor ya se hace sentir y con la
llegada del buen clima comienza a
incrementarse el número de personas que
pasan sus mañanas y tardes realizando
ejercicio físico. La caminata, el trote y
las ya popularizadas maratones encabezan
la lista de actividades preferidas,
seguidas de cerca por la práctica de yoga,
pilates e incluso boxeo.
Uno de los peligros de comenzar a hacer
gimnasia o deportes justo antes del verano
radica en la falta de costumbre pues
empezar abruptamente puede provocar
dolores, molestias y lesiones. Sumado a
esto, otro de los principales
inconvenientes es la falta de preparación
previa.
En este sentido, hay diversas cuestiones a
tener en cuenta. La primera es la
importancia de hidratarse antes,
durante y después de la actividad en
cuestión. También es relevante prestar
atención a la ingesta de alimentos
pues no es recomendable hacer deporte
antes de las dos horas posteriores al
almuerzo o la cena.
Por otro lado, según los especialistas, la
entrada en calor, es decir la
etapa- cuya duración depende de la
actividad elegida y el estado físico de
quién la lleve a cabo- durante la cual los
músculos deben realizar estiramientos que
contribuyan a su preparación para lo que
vendrá, es fundamental. Sin embargo,
muchos aficionados no la cumplen,
provocándose numerosas lesiones.
"Tomar agua entre 15 y 20 minutos antes y
después de haber realizado una determinada
actividad así como también hidratarse
mientras ésta transcurre es uno de los
cuidados básicos. Dentro de esta área cabe
señalar que si el ejercicio realizado se
prolongara durante más de 90 minutos, es
recomendable ingerir bebidas que contengan
minerales, sodio, o glucosa; mientras que
en el caso de las maratones o triatlones,
por ejemplo, hay que comer alimentos
sólidos", postuló a Pro-Salud News
el doctor Norberto Debbag, medico
cardiólogo y deportólogo.
En cuanto a la preparación previa, el
especialista indicó: "En toda prueba
hay qua hacer una entrada en calor o
precalentamiento, pero también y no menos
importante, un enfriamiento. Por esa
razón vale decir que realizar un deporte
consta de tres pasos: el previo, la
actividad en sí y el posterior. La entrada
en calor puede prolongarse por 15 o 20
minutos durante los cuales es importante
hacer ejercicios de elongación y un
pequeño trote. La etapa final, por su
parte, tiene una duración similar y
permite que la temperatura corporal
disminuya paulatinamente, que el organismo
vaya eliminando los residuos metabólicos y
lentamente se restituya la fisiología
habitual de reposo".
Conclusiones de una investigación
No obstante, según una revisión de
estudios realizada por científicos
australianos y cuyas conclusiones forman
parte de la publicación The Cochrane
Library Newsletter, el
precalentamiento o estiramiento contribuye
a no sufrir lesiones pero es ineficaz a la
hora de evitar los dolores musculares
característicos, por ejemplo, del día
posterior.
Entre los datos recabados hay 10
investigaciones, nueve de las cuales
fueron realizadas en laboratorio por entre
10 y 30 voluntarios cada una. La duración
de las pruebas varió entre los 40 segundos
y los 10 minutos y el objetivo fue
establecer, utilizando una escala de 100
puntos, el grado de molestia o dolor luego
de haber realizado el precalentamiento y
la actividad.
A raíz de esta muestra, los especialistas
concluyeron que aún habiendo realizado el
trabajo previo, el dolor muscular
posterior se reducía sólo en un punto.
"La relevancia de la entrada en calor es
discutida. Si bien es cierto que los
músculos de una persona que nunca realiza
actividad física le van a doler luego de
ir al gimnasio por primera vez en un año,
es muy importante cumplir con esta paso
antes de empezar la actividad del día",
comentó el doctor Debbag.
El control de los factores de riesgo
Además del precalentamiento o
estiramiento, todo deportista ya sea
profesional, semi profesional u ocasional,
debe llevar a cabo antes de comenzar a
realizar actividad física, una evaluación
médica.
De acuerdo con el doctor Oscar Mendoza,
médico cardiólogo, especialista en
Medicina del Deporte del Instituto
Cardiovascular de Buenos Aires (ICBA), "la
realización de un correcto diagnóstico del
estado de salud del deportista permite
disminuir las probabilidades de
encontrarnos con situaciones desagradables
que en muchas ocasiones ponen en riesgo la
vida del individuo. Quienes seguro deben
pasar por el consultorio son aquellas
personas que presentan uno o más factores
de riesgo coronario que les puedan jugar
en contra. Aquellos que no cuentan con
ninguno de ellos, pero desean realizar
ejercicio en forma regular, igualmente
deben someterse a un examen completo que
les permita saber dónde están parados y
qué nivel de exigencia pueden manejar".
Entre los principales factores de riesgo,
aquellos que pueden atenuarse o provocar
una complicación al momento de realizar
una exigencia indebida, se encuentran la
hipertensión arterial, la diabetes II, el
tabaquismo, el sedentarismo, el colesterol
elevado, el sobrepeso y la obesidad.
En el caso de los deportistas jóvenes, la
realización de una prueba de
resistencia también contribuye a
descartar posibles factores
cardiovasculares que pueden estar
impidiendo la práctica de actividad
física; mientras que para los mayores, es
una pauta para determinar si existen
indicios de cardiopatías.
"La evaluación pre-competitiva permite
conocer si el paciente está sano y también
descartar alguna patología que pueda
afectarlo. Hay que tener en cuenta que
nadie puede llegar a la consulta sin haber
corrido ni 50 metros pretendiendo realizar
una maratón de 10 kilómetros esa misma
semana. Esto no quiere decir que no haya
alternativa porque, si no se puede
realizar determinada actividad, siempre
existe una alternativa para elegir otra",
concluyó el doctor Mendoza.
Tips importantes
- Procure elegir el calzado adecuado para
cada actividad. Además, las zapatillas
deportivas deben tener arco.
- Elija vestimenta clara y con
ventilación.
- Utilice gorra.
- Evite las horas pico, entre las 12 del
mediodía y las cuatro de la tarde.
- Procure no realizar actividad física si
hay más de 30 grados o mucha humedad.
Número de matrícula de los especialistas
consultados
- Doctor Norberto Debbag: M.N. 51.320
- Doctor Oscar Mendoza: M.N. 70.475
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