En el mundo, la era posgenómica empieza a
convertirse en una oportunidad de negocio para los centros de
investigación y pequeñas empresas privadas, que advirtieron en el
conocimiento del genoma humano el futuro de la medicina, coincidieron
Michel Goldberg y José Elías García Ortiz.
El presidente del Comité para la Investigación
de Cáncer Pasteur de Francia y el director de investigación del
Instituto de Ciencia y Medicina Genómica en Torreón, Coahuila,
respectivamente, concedieron que por la complejidad de los estudios y
tratamientos, este tipo de medicina es cara y no es accesible a toda la
población.
En Estados Unidos, empresas, universidades y gobierno, juntos o por
separado, han lanzado iniciativas para hacer accesible la medicina
genómica, incluso a través de Internet. En México sólo tres centros
especializados y una empresa ofrecen este tipo de servicios. Se trata
del Instituto Nacional de Medicina Genómica (Inmegen), el Centro de
Ciencias Genómicas de la UNAM, el Centro de Investigaciones Biomédicas
de Occidente, ubicado en Torreón, Coahuila, y el Instituto de Ciencia y
Medicina Genómica.
En el mercado mundial, comentó García Ortiz, si un paciente desea
conocer la secuencia de su genoma debe pagar más de mil dólares. En
México el costo es mayor y solamente pueden tener acceso a ese servicio
de manera gratuita quienes participan en los proyectos de investigación
de las instituciones mencionadas o de algunas empresas farmacéuticas.
"Para lograr tener aplicaciones y poder usar los avances científicos
de la investigación genómica de manera comercial, gobierno y empresas
tendrán que hacer un esfuerzo para lograr que esta medicina sea
accesible a toda la población", subrayó Goldberg. Para lograrlo no sólo
son necesarios los recursos económicos, pues se requieren científicos,
centros de investigación y la educación de la propia población.
En Francia, el Instituto Pasteur está desarrollando un test para
detectar mediante una muestra de sangre si una mujer es portadora o
tiene probabilidades de desarrollar cáncer de mama. Si esta
investigación pasa las últimas pruebas, será un avance importante y
podrían quedar atrás la mastografía y la biopsia como métodos de
detección.
Ambos especialistas señalaron la confusión que persiste entre la
población sobre las diferencias entre genética y genómica. La primera
es el estudio de una pequeña porción de genes para saber cómo actúan en
una enfermedad. La genómica, por su parte, permite saber cómo
participan e interactúan todos los genes de una persona en una
enfermedad.
Por ejemplo, citó García Ortiz, la diabetes es un padecimiento
multifactorial, pero ya se identificaron nueve genes con mayor
susceptibilidad que inciden para que quienes los porten sean más
propensos a desarrollar la enfermedad por herencia genética. Un
interesado puede enviar una muestra de su sangre o mucosa a una empresa
en Estados Unidos, previo pago por el servicio, para saber si es
portador de ese gen.
Explicaron que el genoma humano tiene 25 mil genes responsables de
la formación de poco más de dos millones de proteínas. Las ciencias
posgenómicas son la genómica —permite saber lo que podría remotamente
suceder en el organismo—; la transcriptómica —lo que es factible que
suceda— y la proteómica —nos dice lo que está sucediendo. Comentarios reservados a usuarios registrados. Por favor ingrese al sistema o regístrese. Powered by AkoComment! |