Más de 15 millones de personas trabajan en Europa en el sector
sanitario, alrededor del 9,5% de la población activa. Cuidan la salud
de los 490 millones de habitantes que pueblan la Europa de los 27
gracias a presupuestos que de media representan el 8% del PIB.
Comparten desafíos, como el envejecimiento de la población o la
desmotivación, pero unos con mayor sueldo que otros. De entrada, los
profesionales del sector público (médicos y enfermeros) están, en
general, mejor pagados que en el privado.
Un informe de Adecco Medical & Sciencie, la consultora
especializada en el sector sanitario del Grupo Adecco, revela que el
sector privado español ocuparía el séptimo puesto por remuneración en
un ranking de diez países, en el que tendría por delante a Suiza,
Noruega, Dinamarca, Suecia, Reino Unido, Alemania y Bélgica y, por
detrás, a Francia e Italia. Los sueldos suizos, además, duplican los
españoles. El estudio, que toma como base el sueldo medio bruto del
total de profesionales de la salud en España, señala que los
trabajadores del sector público tendrían una mejor posición a nivel
europeo, ya que Italia, Francia y Bélgica muestran sueldos inferiores.
Suiza, de nuevo, es el país que más paga a sus empleados públicos.
Participación femenina
El estudio destaca también que el número total de personas que
trabajan en el sector sanitario ha experimentado estos últimos años un
crecimiento constante, pasando de los 13 millones de personas de 1995 a
los 15 millones del año 2000, y un aumento en la participación de las
mujeres. Las diferencias son también marcadas en cuanto a la cantidad
de enfermeros por cada 1.000 habitantes entre los países de la Unión
Europea, sobre todo cuando se considera sólo a los enfermeros
cualificados. Los estudios indican que hay una gran cantidad de
vacantes en los hospitales y que el número de inscripciones en las
escuelas de enfermería disminuye constantemente.
El envejecimiento y la insatisfacción explican en buena medida el
déficit de personal. Entre los enfermeros avanza la jubilación
anticipada y se apuntan como causas del desánimo la falta de autonomía
frente a la profesión médica, sus limitadas competencias con respecto a
la prescripción o al diagnóstico y el reconocimiento salarial. En el
caso de los médicos, uno de los problemas a los que se enfrentan es el
tiempo semanal de trabajo. Desmotivación que conduce al burnout o
síndrome de agotamiento, que en el caso de los enfermeros afecta al
25%, con mayor incidencia en Francia, Eslovaquia, Bélgica y Reino Unido
que en Noruega y los Países Bajos, donde el nivel de satisfacción es
mayor.
Más féminas. El 70% de los profesionales son mujeres
Las mujeres representan el 77% de una profesión hasta ahora
dominada por hombres. Al principio de la década en la República Checa,
Finlandia y Polonia había más mujeres ejerciendo la medicina que
hombres. La tendencia parece continuar a la vista de las nuevas
generaciones de médicos que se están formando en estos momentos. Según
la OMS, en el Reino Unido, el 70% de los alumnos en las escuelas
médicas son mujeres. Esta feminización puede tener efectos en las
condiciones de trabajo del sector y en la estimación del número de
médicos en el futuro, debido a que las mujeres que tienen hijos pueden
tener un horario laboral más reducido que los hombres, por lo que la
oferta de servicios puede disminuir. En cuanto a la enfermería, el
sector mantiene una amplia mayoría de mujeres, de hecho, a pesar del
déficit de personal, ningún indicador sugiere un aumento de la
participación de hombres.
Futuro. El reto de la formación y la movilidad profesional
Noruega es el país con mayor porcentaje de médicos por cada
1.000 habitantes (14,84) en un ranking de 10 países europeos de la OMS
correspondiente a 2006, mientras que Bélgica lidera la clasificación en
enfermeros (4,49). España ocupa la séptima posición, con 7,68 médicos
por cada 1.000 habitantes, mientras que el porcentaje de enfermeros es
de 3,3. La respuesta al déficit de personal sanitario es diferente en
cada país, así, países como Bélgica, Irlanda, Países Bajos, Noruega y
Suiza han puesto el acento en una mayor y reforzada oferta educativa,
frente a la vía de fomentar la inmigración de profesionales
extranjeros. Los hospitales tienen también en su mano atraer a
profesionales, a través de una buena gestión. El estudio de Adecco
señala, no obstante, las diferencias en materia de formación entre los
países y los problemas de movilidad en un mercado laboral internacional. Comentarios reservados a usuarios registrados. Por favor ingrese al sistema o regístrese. Powered by AkoComment! |