Parece incrementar la sobrevida aún en los pacientes de alto riesgo.
En el año 2004 cerca del 5% de los adultos por encima de los 20 años en
los Estados Unidos, incluyendo un 3% de personas por encima de los 60
años, fueron obesos mórbidos con un índice de masa corporal (IMC) de 40
o mayor [1]. La terapéutica médica (por ejemplo, sibutramina y
orlistat), dietas y ejercicios y cirugía bariátrica, han sido usadas en
un intento por reducir la mortalidad y las complicaciones de las
comorbilidades asociadas con la obesidad [2,3]. El uso de la cirugía
bariátrica ha aumentado marcadamente en la década pasada, desde poco
más de 10.000 casos en los Estados Unidos en 1996 a cerca de 70.000
casos en 2004 [4] y se estima unos 170.000 para 2005, de acuerdo con la
American Society of Bariatric Surgery [5].
Varios estudios quirúrgicos han demostrado la seguridad y eficacia de
la cirugía bariátrica, especialmente en términos de tasas de
complicaciones y mortalidad y en la reducción de las comorbilidades con
el paso del tiempo [6-18]. Pocos de esos estudios, sin embargo, han
tenido grupos de control [7,17,18] y la mayoría de ellos involucraban
individuos menores de 65 años de edad. En efecto, cuando el Center for Medicare and Medicaid Services
(CMS) reconsideró el pago para los procedimientos de reducción de peso
en los pacientes de 65 años o mayores, se propuso no cubrir a esta
población [19], puntualizando que un estudio había mostrado una tasa de
mortalidad del 4,8% a los 30 días para los individuos mayores de 65
años sometidos a cirugía [15]. Aunque Medicare finalmente cubre estos
procedimientos para los paciente de 65 o más años, Mark McClellan,
administrador de CMS requirió más datos sobre este grupo de alto riesgo
[20].
En este estudio, los autores compararon una cohorte de obesos mórbidos
beneficiarios de Medicare sometidos a cirugía bariátrica, con una
cohorte similar de obesos mórbidos – también cubiertos por Medicare –
que no fueron operados. Se compararon las tasas de sobrevida y la
presencia de condiciones de comorbilidad entre los grupos quirúrgico y
no quirúrgico durante un período de 2 años después de la cirugía.
MétodosOrigen de los datos y escenario
Se usaron los datos de inscripción y de reclamos a Medicare para
obtener información sobre las características de los pacientes y los
resultados. Los reclamos incluyeron datos de los servicios
hospitalarios de internación y ambulatorios, equipamiento médico
durable y facilidades de enfermería entrenada, servicios de cuidados en
domicilio, hospicios y proveedores (principalmente médicos); estos
datos brindaron códigos de procedimientos y diagnóstico por ICD-9. Se
usaron los datos de 3 años para identificar la cohorte quirúrgica y no
quirúrgica con un período prequirúrgico definido como 12 a 6 meses
antes de la cirugía. Se excluyeron de este estudio a los beneficiarios
de Medicare HMO (Health Maintenance Organization),
que comprenden aproximadamente el 14% de todos los beneficiarios, por
la falta de datos. Se obtuvieron del archivo de Medicare las fechas de
nacimiento, muerte y género.
Selección de la cohorte
Cohorte quirúrgica
La cohorte quirúrgica incluyó pacientes que tenían diagnóstico de
obesidad mórbida (código 278.01 del ICD-9 ) en cualquier archivo y uno
de los siguientes 6 códigos de procedimiento (Current procedural terminology
[CPT]) en el archivo médico, entre el 1 de enero de 2002 y el 31 de
diciembre de 2004: 1) Código CPT 43.846: procedimiento gástrico
restrictivo, bypass gástrico en Y de Roux con reconstrucción
del intestino delgado < 100 cm; 2) Código CPT 43.847: procedimiento
gástrico restrictivo, bypass en Y de Roux con reconstrucción
del intestino delgado > 100 cm; 3) Código CPT 43.842: procedimiento
gástrico restrictivo sin bypass gástrico para la obesidad
mórbida; gastroplastia vertical con banda; 4) Código CPT 43.843:
procedimiento gástrico restrictivo sin bypass gástrico para
la obesidad mórbida; otro distinto a la gastroplastia vertical con
banda; 5) Código CPT 43.848: revisión de procedimiento gástrico
restrictivo para obesidad mórbida y 6) Código CPT 43.659: procedimiento
laparoscópico no listado, estómago. Los autores incluyeron este rango
de tipos quirúrgicos porque querían capturar la totalidad de la cirugía
de reducción de peso. En particular, si se excluían las revisiones, se
hubiera podido subestimar el riesgo de mortalidad o sobreestimar la
resolución de las comorbilidades en los pacientes quirúrgicos. Aunque
el código para cirugía laparoscópica no es el ideal, no quisieron
excluir este tipo de cirugía porque se ha convertido rápidamente en la
cirugía bariátrica más prevalentemente efectuada [21].
Ulteriormente investigaron todos los casos quirúrgicos elegibles para
asegurarse de que fueran para el tratamiento quirúrgico de la obesidad,
especialmente porque el código CPT 43.659 para procedimientos
laparoscópicos es inespecífico. Se excluyeron a los pacientes si sus
códigos de cirugía bariátrica estaban enlistados como urgente o
emergente, si la fuente de admisión fue la sala de guardia o si tenían
códigos de diagnóstico ICD-9 que indicaban la presencia de condiciones
(cáncer en actividad, enfermedad metastásica, angina inestable, ataque
cardíaco reciente, enfermedad inflamatoria intestinal) que los hicieran
pobres candidatos para la cirugía en el período de 180 a 360 días
previos a la fecha de la operación.
Cohorte no quirúrgica
Para crear una muestra de pacientes no quirúrgicos que fueran
apropiados para la cirugía bariátrica pero que no la hubieran recibido,
los autores identificaron a los pacientes que tenían diagnóstico de
obesidad mórbida (código ICD-9, 278.01) en cualquiera de los archivos
entre el 1 de enero de 2002 y el 31 de diciembre de 2004 y que no
tuvieran ninguno de los códigos CPT para cirugía bariátrica
mencionados, o un código DRG 288 (cirugía de obesidad) u otros códigos
de pacientes internados que podrían indicar cirugía de la obesidad
(códigos de procedimiento del ICD-9, 44.0 – 45.95). Estos pacientes
fueron también sometidos a las mismas restricciones de exclusión como
los de la cohorte quirúrgica, ya mencionadas.
Comorbilidades
Se codificó a los pacientes como teniendo alguna de las 16 condiciones
comúnmente relacionas con la obesidad mórbida (diabetes, apnea del
sueño, hipertensión, hiperlipidemia, enfermedad coronaria, litiasis
vesicular, hígado graso, estasis venoso, celulitis, trombosis venosa
profunda, embolia pulmonar, artritis, incontinencia de esfuerzo,
reflujo gastroesofágico, lumbalgia, hernia de disco) si cualquier
código de diagnóstico ICD-9 para esas condiciones aparecía en
cualquiera de los archivos durante los siguientes 5 períodos: 360 a 180
días antes de la cirugía y 0 a 180, 181 a 360, 361 a 540 y 541 a 720
días después de la cirugía. Debido a que los datos por reclamo no
distinguen entre las pruebas diagnósticas y el diagnóstico de la
presencia de una condición, es posible que se hubieran señalado a
pacientes como teniendo una de las mismas cuando el médico estaba
haciendo pruebas para descartar la presencia de dicha condición. Esta
definición estricta de resolución yerra sobre el lado de la
subestimación del impacto de la cirugía bariátrica.
Los pacientes quirúrgicos fueron sometidos a extensas pruebas
prequirúrgicas en los 6 meses inmediatamente anteriores a la cirugía,
lo que no ocurrió con los pacientes no quirúrgicos. Debido a esto, los
pacientes quirúrgicos es probable que tengan más condiciones de
comorbilidad registradas en los 6 meses previos a la operación. Por lo
tanto, se decidió no usar el período inmediatamente anterior a la
cirugía para establecer la línea de base de la presencia de las
comorbilidades. En lugar de ello, se estableció la línea de base de las
comorbilidades durante el período de 360 a 180 días antes de la
operación. Dado que también es cierto que los pacientes quirúrgicos
tienen más probabilidades de ser sometidos a pruebas para detectar
condiciones de comorbilidad inmediatamente después de la cirugía, lo
que – nuevamente – no ocurre en los pacientes no quirúrgicos, los
autores excluyeron los reclamos presentados durante la estadía de
internación asociados con el procedimiento de cirugía bariátrica
durante un período calculado entre los 0 a los 180 días.
Análisis estadístico
Visión general
El análisis se basó en un abordaje en el que se compararon los
resultados de la cohorte quirúrgica con los de un grupo de pacientes
que tenían similares características demográficas y comorbilidades pero
que no fueron operados.
Construcción del grupo no quirúrgico
Para construir el grupo de control, se identificó primero a los 549.607
pacientes con obesidad mórbida que entraban en el criterio establecido
por los autores para la cohorte no quirúrgica. Luego se seleccionó al
azar una muestra de 190.448 pacientes de este grupo, 16 veces el número
de pacientes quirúrgicos. El uso de más controles hubiera producido un
aumento insignificante en la precisión.
Cada paciente en el grupo no quirúrgico fue asignado randomizadamente a
un “seudo” mes de cirugía, entre enero de 2002 y diciembre de 2004, con
una probabilidad proporcional al porcentaje de cirugías realizadas en
cada mes en la cohorte quirúrgica. Luego se calcularon los pesos de
mortalidad estandarizada para sopesar la cohorte no quirúrgica de
manera que tuviera características similares que la cohorte quirúrgica
a nivel de la línea de base [22,23]. Para implementar este método, se
estimó primero una regresión logística para predecir la probabilidad, p, de cirugía usando ambos grupos (quirúrgico y no quirúrgico).
Esta regresión incluyó como variables aclaratorias: año de la cirugía
(por ejemplo, 2002), edad agrupada en 15 categorías, género,
indicadores de la presencia de cara una de las 16 condiciones de
comorbilidad a los 360 a 180 días antes de la fecha quirúrgica,
indicadores de, número de condiciones de comorbilidad (0, 1, 2, 3 ó
más), edad lineal y edad lineal al cuadrado. También se incluyeron los
siguientes términos de interacción: año de cirugía y edad lineal, año
de cirugía y género, año de cirugía e indicadores de las 16
comorbilidades, edad lineal y los indicadores de las 16 comorbilidades,
género y edad lineal y género y los 16 indicadores de comorbilidades.
Este modelo de especificación fue seleccionado basado en el Akaike Information Criterion [24]. En los cálculos de los autores, se le dio a cada caso quirúrgico un peso de 1 y a cada caso no quirúrgico un peso de p / (1 – p),
lo que se ajusta a la distribución pesada de las características del
grupo no quirúrgico que coinciden con las del grupo quirúrgico [25].
Este método determina a los pacientes no quirúrgicos con
características más cercanas coincidentes con aquellos sometidos a
cirugía, con más precisión. Se calcularon los pesos y se analizaron
separadamente los resultados de los pacientes de menos de 65 años y de
aquellos de 65 o más años y los de la muestra global.
Objetivos finales
Se analizaron las tasas de sobrevida usando las curvas de Kaplan-Meier
para los grupos quirúrgico y no quirúrgico de control sobre un período
de seguimiento de 2 años. Se presenta el número de pacientes con
riesgo, en donde el número de la cohorte no quirúrgica está normalizado
para reflejar los pesos calculados para hacer coincidir los 2 grupos en
la línea de base. Se usaron pruebas de t de 2 lados para comprobar las
diferencias en la sobrevida después de la cirugía.
Se comparó la prevalencia de las comorbilidades mayores relacionadas
con el peso del paciente (diabetes, apnea del sueño, hipertensión,
hiperlipidemia y enfermedad coronaria) entre los grupos durante 4
intervalos de 180 días después de la cirugía. Se usó la prueba de x2 para establecer las diferencias en la presencia de comorbilidades entre las cohortes quirúrgica y no quirúrgica.
El análisis se efectuó usando el SAS, versión 8.2 y 9.1 (SAS Institute
Inc, Cary, NC) y SUDAAN 9.0.1 (Research Triangle Institute, Research
Triangle Park, NC). El Harvard Medical School/Harvard School of Dental Medicine Committee on Human Studies aprobó este estudio.
Resultados
Características de la población y procedimientos
Cerca de 12.000 (11.903) beneficiarios de Medicare, incluyendo 10.593
pacientes menores de 65 años y 1.310 de 65 o más años, fueron sometidos
a cirugía bariátrica entre el 1 de enero de 2002 y el 31 de diciembre
de 2004. El 78% de ellos fueron del sexo femenino. Durante el período
de 360 a 180 días previos a la cirugía, la prevalencia de
comorbilidades relacionadas con el peso diagnosticadas fue sustancial:
diabetes en el 45% de la muestra, apnea del sueño en el 31%,
hipertensión en el 59%, hiperlipidemia en el 38% y enfermedad coronaria
en el 10%. El uso de la mortalidad estandarizada llevó a la creación de
una cohorte no quirúrgica virtualmente idéntica a la quirúrgica para
toda la muestra y para aquellos por arriba y por debajo de los 65 años
de edad.
La mayoría de los procedimientos realizados durante este período fueron bypass
gástrico abierto (67%). Del resto, 1,8% fueron gastroplastias
verticales con banda; 28,5% tuvieron un procedimiento laparoscópico y
0,3% tuvieron un procedimiento gástrico restrictivo distinto que la
gastroplastia vertical con banda. Un 2,4% de los casos fueron
revisiones de cirugías previas.
Sobrevida en las cohortes quirúrgica y no quirúrgica
Los pacientes de Medicare con obesidad mórbida que fueron sometidos a
cirugía bariátrica tuvieron tasas aumentadas de sobrevida en los 2 años
de este estudio, en comparación con un grupo similar de pacientes
obesos mórbidos que no fueron operados. A los 2 años, la tasa de
mortalidad en la cohorte quirúrgica versus la no quirúrgica fue de 4,5%
versus 8,6% (P < 0,001) para los pacientes por debajo de los 65 años y del 8,0% versus el 12,2% (P < 0,001) para los pacientes de 65 o más años.
Hubo inicialmente una desventaja en la sobrevida para la cohorte
quirúrgica reflejando una más alta mortalidad postquirúrgica, llamada
tasa de mortalidad a 30 días, para aquellos de 65 o más años y para los
de menos de 65 años, que fue del 1,55% y del 1,27%, respectivamente en
el grupo quirúrgico en comparación con el 0,53% y 0,49% para el grupo
no quirúrgico (P
< 0,001). No obstante, esta desventaja inicial en la sobrevida fue
superada a los 6 meses en el grupo de menos de 65 años y a los 11 meses
en el grupo de 65 o más años.
Prevalencia relativa de las comorbilidades en el tiempo
La prevalencia diagnosticada de todas las 5 comorbilidades fue menor en
el grupo quirúrgico que en el grupo control en los 2 años posteriores a
la cirugía (P < 0,001). La diabetes estuvo 14,1% puntos más baja (36,2 vs 50,3; P < 0,001), la apnea del sueño fue 5,3% puntos menor (24,3 vs 29,6; P < 0,001), la hipertensión 17,7% puntos menos (46,5 vs 64,3; P < 0,001), la hiperlipidemia fue 14,8% puntos menor (27,9 vs 42,7; P < 0,001) y la enfermedad coronaria 6,2% puntos más baja (8,6 vs 14,8; P
< 0,001). El análisis separado por subgrupos halló fuertes mejores
similares para los pacientes quirúrgicos por debajo de los 65 años en
relación con su contraparte no quirúrgica. Para los pacientes con 65 o
más años, las mejoras relativas fueron fuertes para todas las
condiciones (P < 0,001) excepto para la apnea del sueño (P = 0,45), en donde no hubo una diferencia discernible entre los grupos a los 2 años de postoperatorio.
Discusión
Este estudio investiga el impacto en la salud de la cirugía bariátrica,
un procedimiento usado cada vez más para una condición que afecta a un
gran y creciente porcentaje de la población. Con la excepción de 3
estudios, la bibliografía existente no ha comparado a los pacientes
sometidos a cirugía bariátrica con un grupo control equivalente
[7,17,18].
Estos estudios muestran alguna reducción en las comorbilidades y en la
mortalidad después de la cirugía, pero todos están basados en
operaciones realizadas en el año 2002 o antes y no incluyen la muestra
de los de más de 65 años que han analizado los autores. Aunque un
ensayo clínico randomizado podría idealmente ser usado para determinar
el valor diferencial de este procedimiento sobre los abordajes no
quirúrgicos, esos ensayos no han ocurrido y no es probable que se
lleven a cabo en este punto de difusión del procedimiento. Entonces, el
análisis de los datos de observación, utilizando mortalidad
estandarizada para crear un grupo comparable de control, representa la
mejor alternativa realizable.
Los autores han hallado que la cirugía bariátrica tiene beneficios
dramáticos en relación con el tratamiento que no incluye a la cirugía.
Tanto para pacientes jóvenes discapacitados como para pacientes de 65
años o mayores, la cirugía finalmente incrementa la sobrevida con
puntos de entrecruzamiento a los 6 y 11 meses, respectivamente. Además,
las tasas de mortalidad operatoria son considerablemente más bajas que
las descritas con anterioridad (por ejemplo, para el grupo de 65 o más
años, la muestra de los autores tuvo una tasa de mortalidad a 30 días
del 1,55% versus el 4,8% reportado en un estudio previo utilizando los
datos de Medicare) [15]. Esto pudo deberse a un aumento de la habilidad
por parte de los cirujanos y a las mejoras hospitalarias en la
selección de los pacientes o a los más nuevos abordajes laparoscópicos.
Los autores también hallaron una reducción importante en la prevalencia
de las 5 condiciones de comorbilidad mayores en los pacientes sometidos
a cirugía.
El grupo no quirúrgico tuvo una mortalidad notablemente alta en el
seguimiento de 2 años: 8,6% para los pacientes menores de 65 años y
12,2% para los de 65 o más años, así como tasas altas y en aumento de
condiciones de comorbilidad diagnosticadas a través del período en
estudio. Estos pobres resultados para el grupo no quirúrgico subrayan
la necesidad de un grupo control para interpretar cualquier hallazgo en
el grupo quirúrgico.
Este estudio tiene varias limitaciones. No evalúa costos ni
complicaciones inmediatas de la cirugía. Se basa en datos de reclamos,
que tienen pérdida de variables claves para caracterizar a los grupos
quirúrgicos y no quirúrgicos que podrían estar disponibles en los datos
clínicos como, por ejemplo, las mediciones del IMC. Los datos de
reclamos también están limitados por la certeza del reporte médico de
los códigos de diagnóstico del ICD-9. Como resultado de ello, el grupo
no quirúrgico puede no parecerse exactamente al grupo quirúrgico a
pesar de los intentos de los autores para hacerlos similares utilizando
criterios de exclusión y una puntuación sopesada de propensión. Algunos
trabajos pasados han hallado que la puntuación de propensión que
coinciden con los datos administrativos tiene efectos mayores que
aquellos que utilizan los datos clínicos [26].
Los datos de este trabajo son anteriores a la codificación más precisa
de las cirugías laparoscópicas para la reducción del peso, que fue
introducida en los años 2005 y 2006. Los autores intentaron limpiar el
código laparoscópico inespecífico (“laparoscopía no listada del
estómago”) para incluir sólo aquellos procedimientos consistentes con
una operación electiva para la obesidad.
La medición de la presencia de condiciones de comorbilidad se apoya en
la prevalencia diagnosticada de comorbilidades utilizando los códigos
del ICD-9. Los pacientes sometidos a cirugía son más propensos a
visitar a sus médicos en el período inmediato pre y postoperatorio,
donde son evaluados y diagnosticados por las comorbilidades comunes.
Los autores intentaron ajustar esto mediante la exclusión de los
reclamos que ocurrieron durante la estadía hospitalaria por cirugía
bariátrica, así como en el período ventana de 6 meses antes de la
cirugía o de la “seudo” fecha quirúrgica. Además, no se pudo investigar
la severidad de las comorbilidades con esta técnica y, por lo tanto, se
perdieron casos en donde las condiciones mejoraron pero no se
resolvieron de manera completa. Esto significa que las mediciones de
resolución de comorbilidades están probablemente subestimadas, lo que
puede explicar porqué Buchwald y col. [3] hallaron tasas de resolución
mucho mayores después de la cirugía. La mejora menos impresionante en
las comorbilidades en este grupo quirúrgico de Medicare debe ser
considerada a la luz del incremento en las comorbilidades que los
autores hallaron en el grupo no quirúrgico en los 2 años de seguimiento
alejado.
En resumen, los autores del presente trabajo hallaron que tanto la
mortalidad como las condiciones médicas comórbidas están
significativamente reducidas en los pacientes obesos mórbidos de
Medicare que fueron sometidos a cirugía, incluyendo aquellos por debajo
y por encima de los 65 años de edad, en relación con los pacientes de
Medicare con obesidad mórbida que no fueron operados. Dres. Perry CD, Hutter MM, Smith DB, Newhouse JP, McNeil BJ.
(Comentario y resumen objetivo: Dr. Ricardo Altrudi)
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