La hipertensión arterial puede limitar el desempeño intelectual, según un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Münster. Con una terapia adecuada, los afectados pueden llegar sanos a la vejez.
Se dice que la
hipertensión arterial es la muerte silenciosa, pues el afectado no
presenta síntomas y en el 90% de los casos se desconoce las causas que
la provoca. De ahí su peligrosidad, pues con una tensión alta el
corazón trabaja más, puede dañar los vasos sanguíneos, el corazón y los
riñones y provocar un derrame o ataque cerebral. No es curable, pero
los afectados pueden controlarla.
En realidad, los
investigadores de la Universidad de Münster se proponían averiguar de
qué factores depende la capacidad intelectual y qué se puede hacer de
manera individual para mantener un cerebro activo y flexible hasta una
avanzada edad.
En el estudio
participaron 377 personas de una edad de entre 44 y 82 años, que fueron
sometidas a exámenes neuropsicológicos para determinar sus capacidades
cognitivas.
También se examinó si
tenían factores de riesgo potenciales, tales como hipertensión
arterial, alto nivel de colesterol, alto índice de masa corporal (que
mide el estado nutricional de la persona considerando su peso y su
altura), nivel de glucosa en la sangre y de consumo de alcohol y de
nicotina.
Una terapia adecuada
“Más de un 20% de las
limitantes cognitivas son provocadas por factores de riesgo que pueden
tratarse”, dijo el director del estudio Stefan Knecht, al presentar los
resultados de las investigaciones. Como capacidad cognitiva se entiende
las habilidades propiamente humanas tales como razonar y resolver
problemas, percibir objetos y situaciones, pensar, recordar, hablar,
comprender el lenguaje y comunicarse, inventar cosas nuevas, útiles o
hermosas.
Más que el nivel
educativo, la edad o el sexo, lo que influyó en las capacidades
intelectuales de los participantes en el estudio fueron la hipertensión
arterial, alto nivel de glucosa en la sangre o sobrepeso. A mayor nivel
en la presión arterial, más bajo era el rendimiento intelectual de los
participantes. Esta tesis se corroboró incluso cuando los valores
sistólicos (más altos) de la presión arterial se encontraban en un
nivel normal, de entre 130 y 139.
Hacer ejercicio
Los investigadores
sostienen que si los afectados se someten a una terapia adecuada y
mejoran su estilo de vida, sobre todo haciendo ejercicio, pueden llegar
a una avanzada edad con una mente ágil, pese a padecer hipertensión.
Pero sí advirtieron que para ello es necesario empezar con un
tratamiento a una temprana edad, pues la hipertensión arterial afecta
cognitivamente sobre todo al grupo de personas de entre 40 y 60 años de
edad.
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