Hace muy poco hablábamos de las dificultades que existirían en nuestras islas, a la hora de encontrar sustitutos cuando por vacaciones o enfermedad, hubiera necesidad de ellos, aun contratando médicos extranjeros. El problema es general y ahora seis sindicatos han plantado cara a la Consejería de Sanidad que pretende obligar a los médicos de atención primaria de la Comunidad Valenciana a doblar su jornada laboral cuando en la Bolsa de Trabajo no haya sustitutos que puedan asumir las suplencias de los profesionales que se pongan enfermos o se vayan de vacaciones.
La medida ha sido respondida de forma unánime por las organizaciones sindicales que han acudido a la vía contencioso-administrativa para exigir la derogación del acuerdo que fue aprobado con el único voto de la Administración sanitaria en la mesa sectorial y el martes salió publicado en el DOGV.
El Sindicato de Médicos de Asistencia Pública (Simap) ya ha interpuesto el recurso mientras que la FSP-UGT, el CSI-CSIF, el Sindicat de Treballadors de la Salut (STE), CC OO y Metges de la Comunitat Valenciana (de la Confederación de Sindicatos Médicos) han anunciado que sus respectivas asesorías jurídicas lo interpondrán en los próximos días. Los sindicatos señalan que el acuerdo "consuma una grave ilegalidad laboral ya que ningún trabajador puede ser coaccionado para prestar servicios fuera de su horario normal".
El Simap ha hecho además un llamamiento a la desobediencia civil y ha recomendado a sus afiliados que, en caso de que se les imponga la obligación de atender a cupo adicional de pacientes en una nueva jornada laboral, "pidan la orden fehaciente de ello y a continuación se nieguen a cumplirla por ser manifiestamente ilegal", declaró el secretario general del sindicato, Juan Benedito, que recordó que el Estatuto marco establece que entre una jornada ordinaria de siete horas y otra debe existir un interregno de doce horas (la excepción es la guardia).
Benedito ha aconsejado a los coordinadores de los centros de salud que se planten y hagan objeción de conciencia, "porque la obligatoriedad puede constituir un atentado contra la salud de sus compañeros".
Por su parte, el secretario de la Conselleria de Sanidad, Luis Rosado, manifestó a Levante-EMV que el acuerdo se fundamenta en la obligación de asistencia sanitaria y responde a una petición de los médicos de cobrar un trabajo que ya hacían y no percibían. |